A raíz de una pérdida sustancial de $100,000, Ty Dillon, el nieto de la famosa personalidad de las carreras Richard Childress, ha expresado públicamente su frustración. En una decisión sorprendente de NASCAR, el piloto de Roger Penske, quien estuvo involucrado en un altercado con Dillon, recibió un pase libre, lo que generó controversia y descontento dentro de la comunidad de las carreras.
Chris Rice, el presidente de Kaulig Racing, fue sincero sobre la carga financiera que el incidente había impuesto a su equipo. Un gancho de derecha en el Circuito de las Américas que involucró a su piloto, Ty Dillon, resultó en daños significativos al automóvil, lo que generó una costosa factura de reparación. Mientras muchos anticipaban una suspensión de una carrera para el piloto de Penske, no se tomó tal acción, lo que aumentó aún más la angustia de Rice.
Ty Dillon, por otro lado, estaba furioso no solo por las implicaciones financieras del choque, sino también por lo que percibía como una sanción indulgente dada al piloto que había causado el accidente.
El incidente en cuestión ocurrió en el Circuito de las Américas, donde el Chevrolet de Dillon fue deliberadamente girado hacia la derecha por el piloto de Penske, resultando en una colisión con la pared exterior. A pesar de que el choque ocurrió a una velocidad relativamente baja, la intención fue clara, lo que llevó a Dillon a esperar al menos una suspensión de una carrera.
En años anteriores, NASCAR había establecido un precedente para tales incidentes. Tanto Bubba Wallace en 2022 como Chase Elliott en 2023 recibieron suspensiones de una carrera por ganchos de derecha en la parte trasera. Sin embargo, NASCAR justificó la falta de suspensión en este caso citando las velocidades más lentas y las diferentes condiciones de la pista.
NASCAR multó al piloto de Penske con $50,000 y le quitó 50 puntos de piloto, una decisión que hizo que su posición en el campeonato cayera del 11° al 35°. Sin embargo, la falta de una suspensión generó críticas de varios sectores, incluido Dale Earnhardt Jr., una de las voces más respetadas de NASCAR.
Earnhardt Jr. expresó sus preocupaciones sobre la decisión, afirmando que independientemente de la velocidad a la que ocurrió el incidente, un right-hook debería ser tratado de la misma manera en todos los casos. Sin embargo, defendió a NASCAR contra las especulaciones de que las nuevas reglas de exención de playoffs podrían haber influido en su decisión.
En los ojos de muchos, el right rear hooking es el pecado imperdonable en NASCAR, presentando un riesgo significativo para los conductores involucrados. Dado que un incidente similar que involucró al hermano de Ty Dillon, Austin Dillon, llevó a la pérdida de su elegibilidad para los playoffs en 2024, la reciente decisión de NASCAR ha causado revuelo, dejando a muchos cuestionando si las sanciones por tales incidentes deberían ser más estrictas.
Con la controversia en torno al incidente aún fresca, la fraternidad del automovilismo espera el próximo movimiento. ¿Se vengará Ty Dillon en la próxima carrera de Phoenix? Solo el tiempo lo dirá. Por ahora, el debate continúa, arrojando luz sobre la necesidad de consistencia en el proceso de toma de decisiones de NASCAR.