Christian Horner, el arquitecto de Red Bull Racing que ha sido identificado durante mucho tiempo, ha perdido inesperadamente su doble título de CEO y director del equipo, un desarrollo que ha sorprendido a todo el paddock. Incluso el ex piloto y comentarista de Sky Sports Martin Brundle admitió que se sintió «bastante triste» al presenciar un giro tan rápido.
Horner, ahora de 51 años, había dirigido al equipo durante veinte años, guiándolo a 124 victorias en carreras, ocho títulos de pilotos y seis coronas de constructores. Sin embargo, de la noche a la mañana su mandato terminó, con Laurent Mekies asumiendo tanto su antiguo puesto como el título de CEO, mientras Alan Permane ocupa el puesto de Mekies.
Curiosamente, la creciente especulación había insinuado tensiones internas dentro de la organización y en el paddock más amplio de la Fórmula 1. Brundle observó que, a pesar de su amistad y de la habilidad de Horner para transformar a Stewart-Jaguar en la potencia de Milton Keynes, los sutiles signos de discordia eran inconfundibles.
La salida de Chris Horner parece estar estrechamente relacionada con una serie de resultados decepcionantes que dejaron a Red Bull Racing en la cuarta posición del campeonato de constructores de 2025. Además, la conversación sobre el piloto estrella Max Verstappen trasladándose a Mercedes—especialmente dadas las cláusulas en su contrato—creó una sensación de inestabilidad y aumentó la presión dentro de la organización. La búsqueda de un segundo piloto capaz de mantener el ritmo con Verstappen también ha resultado más difícil de lo anticipado.
Sumando a la incertidumbre, surgieron acusaciones de conducta inapropiada hacia una miembro femenina del equipo a principios de 2024. Aunque una investigación interna de Red Bull GmbH finalmente exoneró a Horner, el episodio probablemente atenuó su autoridad y dañó la moral del equipo.
Ahora que se ha anunciado el cambio inesperado, los observadores de la Fórmula 1 están especulando sobre la dirección de Red Bull y si un nuevo liderazgo puede recuperar la forma ganadora del campeonato de temporadas anteriores. El tiempo—y los resultados de las próximas carreras—revelarán si esta audaz reestructuración revitaliza al equipo o complica aún más su lucha en la parte delantera.