En un giro de eventos que quita el aliento en el Gran Premio de Mónaco, la sensación de Aston Martin F1, Lance Stroll, ha sido forzado a salir de acción tras una colisión sorprendente con el piloto estrella de Ferrari, Charles Leclerc. El drama a alta velocidad se desarrolló en el icónico Fairmont Hairpin, donde Stroll, desafortunadamente, no logró detectar a Leclerc en sus espejos retrovisores, lo que llevó a un choque catastrófico que envió ondas de choque a través del mundo del automovilismo.
El intenso impacto vio cómo el ala delantera de Leclerc se desprendió violentamente, lo que provocó una repentina bandera roja en la pista. Sin embargo, mostrando nervios de acero, el resistente piloto monegasco logró regresar cojeando a los boxes, cambiar rápidamente su ala dañada y reanudar la carrera de manera desafiante. Por otro lado, Stroll no tuvo la misma suerte, con su Aston Martin soportando el peso de la colisión, dejando un rastro de escombros a su paso.
El renombrado comentarista Ted Kravitz, reportando en vivo para Sky Sports F1, evaluó sombríamente los extensos daños sufridos por el coche de Stroll, declarando: «Eso es sesión terminada para Lance Stroll, hay demasiado que cambiar. Se necesita cambiar la caja de cambios, así como el difusor, la puerta y la suspensión trasera también.» La gravedad del choque ha lanzado sin duda una sombra sobre las perspectivas de Stroll en el Gran Premio, dejando a los aficionados al borde de sus asientos a la espera de actualizaciones sobre su recuperación y las repercusiones que se desarrollan de este emocionante enfrentamiento en Mónaco.