Carlos Sainz lanza un ataque mordaz a las regulaciones del Gran Premio de Mónaco
El Gran Premio de Mónaco generó controversia cuando Carlos Sainz criticó la regla obligatoria de dos paradas en pits, calificándola como una herramienta para «manipular el resultado» de la carrera. Sainz expresó su frustración, afirmando que la regulación permitía a los pilotos desacelerar estratégicamente, creando oportunidades para que sus compañeros de equipo entraran en pits sin perder posiciones. Esta táctica fue empleada notablemente por ambos pilotos de Williams, impactando la batalla del medio campo y permitiendo que Sainz y Alex Albon aseguraran valiosos puntos en Mónaco.
Sainz manifestó su descontento, declarando: «En última instancia, estás conduciendo dos o tres segundos por debajo del ritmo que el coche puede hacer. Estás manipulando la carrera, y manipulando un poco el resultado.» El español destacó los desafíos únicos de Mónaco, enfatizando cómo el diseño de la pista facilitaba tales tácticas en comparación con circuitos con zonas de DRS y largas rectas.
La carrera vio momentos intensos, ya que las maniobras estratégicas de Williams llevaron a confrontaciones en pista, con George Russell adelantando a Albon fuera de pista al cortar una chicana para retaliar contra las tácticas del equipo. Sainz empatizó con las acciones de Russell, reconociendo la frustración que surge de tales estrategias orquestadas que interrumpen el flujo natural de la carrera.
La controversia se extendió más allá de Williams, ya que Liam Lawson e Isack Hadjar de Racing Bull también participaron en trabajo en equipo para obtener una ventaja competitiva. Esta colaboración resultó en un sólido final de doble puntuación para el equipo, mostrando el impacto de la conducción estratégica en los resultados de la carrera.
La crítica abierta de Sainz arroja luz sobre las complejidades de las regulaciones de Fórmula 1 y la fina línea entre la carrera táctica y la manipulación. El Gran Premio de Mónaco sirve como un recordatorio de cómo las reglas pueden dar forma inadvertidamente a los resultados de las carreras y generar debates dentro de la comunidad del automovilismo.