Josef Newgarden conquista una victoria dominante en la apertura de la temporada 2024 de la IndyCar
La victoria dominante de Josef Newgarden en la carrera de apertura de la temporada 2024 de la IndyCar puede haber parecido fácil, pero las batallas internas que enfrentó para lograrla fueron todo menos eso. A pesar de haber ganado dos campeonatos en sus tres primeros años con el Team Penske, Newgarden pasó cuatro años sin lograr el título general. Acumuló impresionantes 15 victorias en ese período, más que cualquier otro piloto, pero la falta de consistencia ha tenido su precio.
Newgarden llegó a una realización que muchos pilotos nunca alcanzan. Estaba tan enfocado en ganar carreras que el peso de la derrota se volvió increíblemente pesado. Reconoció la necesidad de un cambio de mentalidad. «Tuve que abandonar la idea de la perfección», dice Newgarden. «Soy perfeccionista por naturaleza, siempre buscando maximizar todo. Pero me di cuenta de que esa mentalidad no es sostenible. No estoy renunciando a mi pasión y deseo, pero estoy tratando de encontrar alegría en lo que hago.»
A pesar de haber ganado el prestigioso Indy 500 el año pasado, poniendo fin a una espera de 12 años por la mayor victoria de su carrera, quedó claro que Newgarden no estaba aprovechando completamente su posición. Tuvo que lidiar con dos cambios de ingeniero en dos años, lo que sin duda aumentó la presión que él mismo se imponía. La constante necesidad de recordar configuraciones e instrucciones específicas de años anteriores para compensar la falta de experiencia le quitó el placer por el deporte.
La serie Bus Bros de Newgarden en YouTube, lanzada con Scott McLaughlin, fue quizás un intento de encontrar placer en las carreras fuera del entorno competitivo. Sin embargo, no se retomó en 2024, lo que indica un cambio de enfoque. La reciente revelación de Newgarden arroja luz sobre las dificultades que ha enfrentado en los últimos años.
He recognizes that being a racing driver is a privilege, but he also acknowledges the relentless nature of the profession, which makes it difficult to find joy at times. He has learned to reduce his commitments and eliminate the expectation of perfection. Newgarden now seeks to be happier on the track and enjoy the racing process. He has abandoned his obsession with winning every race and embraced the collaborative nature of being part of a team.
Being a father has also helped Newgarden prioritize his time and find a better balance in his life. This new perspective, combined with his change in mindset, can only lead to positive results. If this is Newgarden in a personal struggle, his recent success and dominant performance in racing indicate that he will be even more formidable in a better mental state. The competition should be on high alert.