Bubba Wallace tiene un nuevo copiloto para la temporada de NASCAR 2025: su hijo de tres meses, Becks Hayden Wallace. El piloto de 23XI Racing, quien alguna vez insinuó que se alejaría de las carreras al embarcarse en la paternidad, ahora encuentra inspiración en su nuevo rol como papá. Con Becks en su mente e incluso en su casco, Wallace está listo para convertir sus casi victorias en Daytona en un triunfo.
Un legado de casi victorias en Daytona
Wallace ha mostrado una consistencia notable en el Daytona International Speedway, con tres finales entre los cinco primeros en su haber. Estuvo tentadoramente cerca de la victoria en las Daytona 500 de 2018 y 2022, finalizando en segundo lugar, y aseguró un sólido quinto puesto en 2024.
Como Daniel Céspedes destacó recientemente en X, el porcentaje de finales entre los cinco primeros de Wallace en Daytona—33.3%—se encuentra entre los mejores para los pilotos activos. Aunque aún no ha reclamado la victoria, su capacidad para navegar el caos de las supervelocidades con estrategia inteligente y tenacidad lo ha convertido en uno de los principales contendientes de la pista.
Paternidad como motivación
Las prioridades de Wallace comenzaron a cambiar a finales de 2024 con el nacimiento de su hijo, Becks. Inicialmente, la estrella de NASCAR se cuestionó cómo su nuevo papel como padre podría afectar su carrera en las carreras. “Las cosas van a cambiar,” dijo Wallace en ese momento, insinuando que las carreras podrían pasar a un segundo plano en su vida familiar.
Pero en lugar de alejarse, Wallace ha encontrado una fuente más profunda de inspiración. Cada casco que usará esta temporada presenta un diseño único inspirado en Becks, simbolizando que su hijo siempre está con él en la pista. “Tenemos al pequeño con nosotros en todos nuestros cascos este año 👣🥹,” compartió Wallace en una emotiva publicación en X.
El renovado enfoque de Wallace es más que solo carreras. Quiere ser un ejemplo para Becks y otros en la comunidad de NASCAR. “La paternidad le ha dado una nueva perspectiva,” compartió un informante. “Está más decidido que nunca—no solo por él, sino por su hijo.”
El camino hacia el Daytona 500 de 2025
A medida que Wallace se prepara para el Daytona 500 de 2025 el 16 de febrero, viene de uno de los récords de super-speedway más consistentes en NASCAR. Aunque el Daytona 500 le ha eludido hasta ahora, su determinación, junto con un agudo sentido de estrategia, podría finalmente darle la victoria que ha estado a solo un paso.
Tener a Becks como su motivador silencioso añade una nueva capa a la historia de Wallace. «Él está corriendo con propósito,» señaló una fuente del equipo. «Cada vuelta, cada decisión, ahora es todo por Becks.»
Un modelo a seguir dentro y fuera de la pista
El viaje de Wallace hacia la paternidad también ha elevado su estatus como modelo a seguir en la comunidad de NASCAR. Conocido por su resiliencia, su naturaleza franca y su defensa de la inclusión, Wallace ahora encarna otro papel identificable: un padre trabajador que equilibra la familia y los objetivos profesionales.
Ya sea que Wallace logre o no su primera victoria en el Daytona 500 este año, su historia de combinar la paternidad con las carreras ya está inspirando a los fanáticos. Con Becks figurativamente a su lado, la campaña de Wallace en 2025 promete ser una de las más significativas hasta ahora.