Max Verstappen superó un fin de semana lleno de contratiempos para reclamar el P2 en la clasificación del Gran Premio de México, un resultado que parecía muy lejos de alcanzar solo unas horas antes. El viernes del neerlandés estuvo marcado por un tiempo limitado en pista, lo que dejó a Red Bull luchando por recuperar el tiempo perdido en las sesiones del sábado. A pesar de una vuelta eliminada y una Q3 de alta tensión, Verstappen logró asegurar un lugar en la primera fila, preparando el escenario para un emocionante enfrentamiento en la carrera del domingo.
Reflexionando sobre su desafiante fin de semana, Verstappen admitió: “Ayer apenas hice vueltas, así que estamos jugando a recuperar. La FP3 tampoco fue buena, así que ya estaba bajo mucha presión.” Como si las cosas no fueran lo suficientemente intensas, la primera vuelta rápida del campeón reinante en la Q3 fue eliminada por exceder los límites de la pista, aumentando la presión para entregar un buen tiempo en su intento final. “Me quitaron mi tiempo de vuelta, así que eso añadió más presión”, explicó Verstappen.
El tres veces campeón del mundo expresó su sorpresa al encontrarse en la primera fila, dado lo notoriamente desafiante que es la pista de México. “Realmente no esperaba estar en la primera fila. Es una de las pistas más difíciles de dominar”, dijo Verstappen.
Comenzando por delante del contendiente al título Lando Norris, Verstappen entrará a la carrera del domingo con un aumento de confianza a pesar de las dificultades de Red Bull. Los aficionados pueden esperar una feroz batalla entre Verstappen y Carlos Sainz de Ferrari, quien logró la pole, ya que el GP de México promete acción al borde de la butaca desde el mismo inicio.