La Aston Martin se unirá al Mundial de Resistencia (WEC) el próximo año y este mes comenzó el programa de pruebas, rodando con el Valkyrie AMR Pro en Silverstone, que sirve como punto de partida para el Valkyrie LMH de competición.
Adam Carter, director de carreras de resistencia en Aston Martin, explicó al sitio web Motorsport.com que se trató de una prueba inicial de los sistemas. Con bajas temperaturas, el volante estuvo en manos de un piloto de confianza que forma parte del equipo del fabricante británico.
Por ahora, Aston Martin trabajará con el Valkyrie AMR Pro antes de llevarlo a la pista con el LMH. Carter explicó: ‘Será una prueba muy intensiva porque la plataforma ya existe, por lo que podemos atacar fuerte con algunos objetivos muy enfocados. Tenemos objetivos muy claros en cuanto a lo que son las pruebas’.
El debut en el WEC en 2025 sigue siendo el plan, pero solo en el segundo trimestre del año el Valkyrie LMH irá a la pista por primera vez. Será un coche no híbrido, con un motor V12 aspirado de Cosworth.