El viaje del equipo Alpine F1 en 2024 fue una montaña rusa que comenzó en los pits pero terminó con una prometedora ascensión. Iniciaron el año con una nota baja, cargados con un coche pesado que se manejaba con la gracia de un carrito de supermercado. Sin embargo, lograron salvar la temporada gracias a un significativo repunte a finales de año. A medida que se preparan para la temporada 2025, Alpine confía en el impulso que han construido para llevarlos hacia adelante y hacia arriba.
Al mando de este esfuerzo están veteranos de las carreras, Oliver Oakes y Flavio Briatore. Están bien versados en las exigencias del mundo de las carreras, entendiendo que no hay atajos hacia el éxito. En cambio, es un trabajo arduo que requiere dedicación inquebrantable, compromiso incansable y un montón de esfuerzo.
Al observar el nuevo Alpine A525, inicialmente parece ser una copia carbonizada de su predecesor. A excepción de algunos pequeños cambios en la posición del logo en la parte delantera, la impresión inicial grita déjà vu. El sistema de suspensión delantera mantiene el mismo diseño de empuje operado por varilla interna que el modelo 2024, completo con cantidades comparables de anti-dive en el brazo superior y una varilla de dirección separada frente a la pierna del brazo inferior.
Sin embargo, un examen más cercano revela algunas modificaciones notables. El sidepod, por ejemplo, presenta una entrada de radiador más superficial que se extiende más alrededor de la esquina exterior que su predecesor. La sección superior de la entrada permanece sin cambios, pero la sección vertical interna y el extremo interno de la entrada en forma de ranura ahora están más adelantados.
El borde del suelo también muestra un puñado de ajustes sutiles. Se ha eliminado una apertura que anteriormente permitía que el flujo de aire se conectara con el chorro del neumático interior. El soporte del suelo, destacado con flechas amarillas, ahora está posicionado en un ángulo menos pronunciado y está en gran medida oculto por la sección trasera del sidepod. Las aletas de giro en el borde exterior del suelo han sido renovadas para ser más agresivas, y la sección curva detrás de ellas es más corta. Estos cambios tienen como objetivo aumentar el flujo de aire extraído de la esquina delantera del suelo y mejorar el posible sellado a lo largo de la sección trasera del borde del suelo.
La suspensión trasera también refleja el sistema interno operado por varilla del modelo 2024. Sin embargo, parece haber más anti-elevación en la pata delantera del wishbone superior trasero, y la pata delantera del wishbone inferior parece estar montada más baja en el interior. Estos cambios sugieren que se ha invertido un trabajo significativo en la geometría trasera.
Aunque el nuevo Alpine A525 parece ser una evolución de su predecesor, el equipo ha implementado claramente algunos cambios estratégicos. La verdadera prueba, sin embargo, llegará durante las pruebas, donde se pondrán a prueba las verdaderas capacidades del coche. Está claro que Alpine no está buscando una solución mágica, sino más bien una serie de mejoras medidas para guiarlos hacia el éxito en 2025.