La maniobra que ha sido un punto de inflexión en las recientes carreras de las 500 Millas de Indianápolis ha sido oficialmente prohibida para 2024. Esta controvertida maniobra, conocida por varios nombres como la serpiente, el dragón y el zigzagueo, implica que un piloto teje técnicamente para romper el vacío del coche detrás de él, impidiendo que se acerque. La IndyCar ha implementado un plan para poner fin a esta maniobra. El ganador del año pasado, Josef Newgarden, cree que la maniobra surgió en 2015, pero fue el uso agresivo de ella por Simon Pagenaud en 2019 lo que generó una amplia discusión en el Speedway.
Los críticos de la maniobra, que suelen ser pilotos que no ganan carreras o no tienen la oportunidad de usarla regularmente, argumentan que representa riesgos significativos debido a las altas velocidades a las que se ejecuta. Hasta ahora, la maniobra ha sido permitida porque técnicamente no infringe ninguna regla de la IndyCar. Como es iniciada por el piloto líder, no puede considerarse bloqueo, ya que el piloto se aleja intencionalmente del coche de atrás en lugar de acercarse a él. Además, penalizar la maniobra después de la carrera presenta complicaciones para el espectáculo, especialmente teniendo en cuenta las intensas emociones y las numerosas ceremonias que siguen a las 500 Millas de Indianápolis.
La maniobra se ha vuelto más prevalente bajo el conjunto de reglas actual, donde el coche delantero está vulnerable a intentos de adelantamiento por detrás. La explicación de Newgarden sobre su defensa contra Marcus Ericsson el año pasado ejemplifica esto, ya que sintió la necesidad de usar la maniobra para evitar perder la carrera, sabiendo que no habría consecuencias. Sin embargo, la introducción de nuevas regulaciones tiene como objetivo abordar este problema y cambiar la dinámica de las carreras, especialmente en esta parte específica de la carrera.
Ericsson, que utilizó la maniobra para ganar en 2022, sigue siendo escéptico de que la nueva regla cambiará significativamente el resultado de esta parte de la carrera. Él cree que, cuando se trata de la última vuelta, todo vale en el Indianapolis Motor Speedway. En cuanto a la aplicación, la IndyCar ha establecido una línea punteada que se extiende desde la pared de los boxes hasta la Curva 4. Si un piloto cruza esa línea con las ruedas del lado izquierdo, estará sujeto a penalizaciones. Las penalizaciones van desde pasar por boxes, una penalización de tiempo equivalente a pasar por boxes si la maniobra ocurre en la última vuelta, o caer al final de la parrilla de relanzamiento si ocurre bajo bandera amarilla. Sin embargo, hay excepciones a esta regla, como cruzar la línea al entrar en boxes, evitar un incidente o hacer un intento claro de regresar a la pista si la entrada a boxes está cerrada inesperadamente.
Además de la prohibición de la controvertida maniobra, hay otro cambio de regla para las 500 Millas de Indianápolis de este año. La IndyCar ha introducido una línea de relanzamiento en otras carreras para minimizar accidentes y carreras agresivas durante los relanzamientos. Sin embargo, esta regla no se aplicará a las 500 Millas, donde a los pilotos se les permite correr donde sea que estén en la pista tan pronto como la bandera verde sea agitada.