BYD continúa desarrollando su plan de expansión en Europa y considera a Alemania e Italia como posibles ubicaciones para una nueva fábrica europea.
Stella Li, vicepresidenta ejecutiva, confirmó en declaraciones al periódico económico italiano, «Sole 24 Ore«, durante el Salón del Automóvil de Múnich, que el objetivo estratégico de BYD es convertirse en uno de los tres mayores fabricantes de automóviles en Europa en un plazo de cinco años.
Después de Hungría, BYD necesita una nueva fábrica para aumentar la capacidad de producción y, en el futuro, planea una unidad dedicada a la producción de baterías para satisfacer la creciente demanda de vehículos eléctricos en el mercado europeo.
Sin embargo, la ubicación de la nueva fábrica de BYD parece estar cuestionada internamente, considerando los altos costos de mano de obra y energía. “Los costos de energía siguen siendo el principal obstáculo, haciendo que un país como Italia sea menos competitivo que otros,” explicó Stella Li, enfatizando la importancia de la competitividad para el grupo chino.
En un escenario europeo desafiante, la expansión de BYD continúa, a pesar de que la compañía recientemente revisó a la baja su pronóstico de ventas para 2025 de 5.5 a 4.6 millones de unidades (-16%). La decisión, ya comunicada a proveedores y socios, refleja la desaceleración del crecimiento después de años de ventas récord: en el segundo trimestre de 2025, las ganancias cayeron un 30% en comparación con el año anterior, la primera caída en más de tres años.
Las principales causas son las desafiantes condiciones del mercado y la fuerte competencia interna en China (que representa el 80% de las ventas), especialmente de Geely y Leapmotor. A pesar de la reducción, el objetivo para 2025 sigue siendo un crecimiento del 7% en comparación con el año anterior, aunque a un ritmo más moderado que en años anteriores.
En este sentido, Stella Li advierte que la industria automotriz china enfrentará un periodo difícil: de los 130 fabricantes activos, al menos 100 podrían salir del mercado debido a guerras de precios.
En Europa, BYD está evaluando adquisiciones estratégicas y planea expandir su fábrica en Hungría, colaborando con proveedores locales y socios internacionales como Nvidia, confirmando así su enfoque global como empresa de tecnología.