Lewis Hamilton, el siete veces campeón del mundo de Fórmula 1, enfrentó la devastación en el Gran Premio de Canadá de 2025 tras un incidente desgarrador que arruinó su carrera. Las esperanzas del piloto británico de un podio o incluso de una victoria se desvanecieron cuando colisionó con una marmota en el Circuito Gilles Villeneuve.
El desafortunado evento ocurrió alrededor de la vuelta 8 o 9, causando daños significativos en el piso del coche de Hamilton y obligándolo a salir de la contienda. Mientras Hamilton lidiaba con las secuelas de la colisión, George Russell logró la victoria para Mercedes, seguido de Max Verstappen y Kimi Antonelli.
En un momento sombrío, Hamilton expresó su tristeza por el incidente, afirmando: «Amo a los animales, y estoy tan triste por esto, es horrible. Nunca me había pasado algo así aquí antes.» El impacto no solo afectó emocionalmente a Hamilton, sino que también puso en peligro su rendimiento en la pista, con el piso dañado ralentizándolo medio segundo por vuelta.
A pesar del contratiempo, la determinación de Hamilton brilló mientras perseveraba para terminar la carrera, asegurando finalmente una quinta posición. Reflexionando sobre los desafíos que enfrentó durante el Gran Premio, incluidos problemas de frenos y errores estratégicos, Hamilton reconoció las difíciles circunstancias pero se mostró agradecido por haber salvado puntos valiosos.
Conocido por su compasión hacia los animales y su compromiso con la conciencia ambiental, el encuentro de Hamilton con la marmota subrayó la naturaleza impredecible del automovilismo y la coexistencia de las carreras con los hábitats de vida silvestre. Si bien incidentes como este son raros, sirven como un recordatorio conmovedor del vínculo entre la naturaleza y el mundo de alta velocidad de la Fórmula 1.