El ex campeón del mundo de Fórmula 1, Jacques Villeneuve, no se contuvo en sus críticas a las decisiones estratégicas de McLaren durante el Gran Premio de Emilia Romagna. Tras la impresionante victoria de Max Verstappen para Red Bull, Villeneuve señaló lo que percibía como una «debilidad» en el enfoque de McLaren, cuestionando su renuencia a tomar acciones audaces para asegurar la victoria.
Villeneuve destacó la elección de McLaren de detener al líder del campeonato mundial, Oscar Piastri, temprano en la carrera, lo que resultó en que Piastri quedara atrapado en una estrategia de dos paradas mientras sus rivales se beneficiaban de permanecer en pista más tiempo. Además, la falta de McLaren para capitalizar una situación de Virtual Safety Car levantó aún más cejas en el paddock.
El piloto canadiense expresó su incredulidad ante la decisión de McLaren de no instruir a Piastri para que dejara pasar a su compañero de equipo, Lando Norris, para desafiar a Verstappen por la victoria. Villeneuve criticó a McLaren por no mostrar el mismo nivel de agresividad y determinación que sus rivales en el campeonato, sugiriendo que parecían conformes con conformarse con el segundo y tercer lugar.
A pesar de los comentarios mordaces de Villeneuve, Norris defendió las elecciones del equipo, reconociendo las complejidades de las órdenes de equipo y la importancia de mantener un campo de juego justo para ambos pilotos. El director del equipo de McLaren, Andrea Stella, también justificó su estrategia, enfatizando el deseo de dar a ambos pilotos oportunidades iguales en pista.
La campeona de W Series en tres ocasiones y comentarista de Sky Sports F1, Jamie Chadwick, intervino en el debate, advirtiendo sobre la introducción de órdenes de equipo demasiado pronto en la temporada. Chadwick enfatizó la necesidad de equilibrar la competencia y la dinámica del equipo para evitar conflictos internos dentro del campamento de McLaren.
A medida que avanza la temporada de Fórmula 1, el foco sigue en las decisiones estratégicas de McLaren y su manejo de las rivalidades internas. Con la batalla por el campeonato intensificándose, la presión está sobre el equipo británico para navegar los desafíos de equilibrar las ambiciones individuales con el objetivo colectivo de asegurar la victoria en las próximas carreras.