En un giro impactante de los acontecimientos en el Gran Premio de Emilia-Romagna, la FIA ha tomado una decisión controvertida respecto al piloto británico Oliver Bearman y el incidente de la bandera roja durante Q1.
La sesión de clasificación fue empañada por no una, sino dos banderas rojas, siendo la primera causada por un aterrador accidente que involucró a Yuki Tsunoda y la segunda provocada tras el incidente de Franco Colapinto en Variante del Tamburello. Sin embargo, fue la situación de Bearman la que dejó a todos en incredulidad.
Bearman, conduciendo para Haas, parecía haber asegurado un lugar en Q2 con un tiempo de vuelta válido justo antes de que la sesión se detuviera. Pero la FIA, tras una revisión exhaustiva, decidió anular el tiempo de Bearman debido a una discrepancia en el momento en que se mostró la bandera roja. Esta decisión ha causado un alboroto en la comunidad de F1 y dentro del equipo Haas.
A pesar de la evidencia que muestra que la bandera roja se exhibió después de que Bearman cruzara la línea de meta, la decisión de la FIA se mantiene. Como resultado, Bearman comenzará desde la 19ª posición en la parrilla para la carrera.
La controversia en torno al tiempo de vuelta eliminado de Bearman ha generado debates y discusiones, con muchos cuestionando el proceso de toma de decisiones de la FIA y las implicaciones que podría tener en el rendimiento del joven piloto en la próxima carrera.