Las esperanzas de Lewis Hamilton para la temporada de F1 2025 se han sumido en la oscuridad mientras anticipa una agonía continua detrás del volante. El siete veces campeón del mundo expresó profundas preocupaciones tras una actuación desastrosa en el Gran Premio de Arabia Saudita, donde terminó en un distante segundo lugar detrás de su compañero de Ferrari, Charles Leclerc.
Las dificultades de Hamilton en Jeddah fueron evidentes, con Leclerc a una asombrosa distancia de 31 segundos al cruzar la bandera a cuadros. El británico, que normalmente es un competidor feroz, admitió sentirse incómodo durante toda la carrera, destacando una grave falta de ritmo y agarre en su Ferrari.
La diferencia entre Hamilton y Leclerc fue la más grande entre compañeros de equipo que terminaron en la misma vuelta, pintando un panorama sombrío de la forma actual del ex campeón. La insatisfacción de Hamilton era palpable mientras lamentaba la falta de aspectos positivos y la abrumadora sensación de incomodidad en su coche.
La transición de Mercedes a Ferrari que inicialmente mostraba promesas se ha convertido ahora en una pesadilla para Hamilton. A pesar de un reciente triunfo en Shanghái, donde ganó el sprint, Hamilton está luchando por replicar ese éxito, dejándolo desconcertado y frustrado sobre sus futuras actuaciones.
Las fortunes contrastantes entre Hamilton y Leclerc dentro del equipo Ferrari han levantado cejas, con el dominio de Leclerc en las carreras recientes subrayando la situación de Hamilton. El experimentado piloto reconoció la marcada diferencia en el rendimiento entre él y Leclerc, señalando las variaciones en la configuración y los estilos de conducción como posibles factores.
Mirando hacia el futuro, Hamilton expresó incertidumbre sobre su capacidad para cambiar la situación en la temporada actual, insinuando un prolongado período de lucha y decepción. Su falta de confianza en el rendimiento del coche y en sus propias capacidades de conducción ha lanzado una sombra de duda sobre sus perspectivas para el resto del año.
A medida que la fraternidad de la F1 se prepara para un nuevo conjunto de reglas en 2026, Hamilton sigue siendo escéptico sobre las posibles mejoras que podría traer. Con su enfoque firmemente centrado en navegar a través de los desafíos del presente, el futuro de Hamilton en el deporte está en la balanza mientras lidia con la incesante búsqueda del éxito en medio de obstáculos crecientes.