Los entusiastas de NASCAR están experimentando una sensación de déjà vu mientras el veterano piloto Casey Mears se prepara para su segundo inicio en la Cup Series desde 2016, esta vez bajo el estandarte de la notoria Garage 66. El equipo, dirigido por Carl Long y anteriormente conocido como MBM Motorsports, está una vez más arrojando un rostro familiar a la luz pública, en un intento por rescatar su reputación después de un comienzo decepcionante en la temporada con Mike Wallace en el Daytona 500.
Mears, el exestrella de Rick Hendrick de 47 años, está listo para regresar a la pista para una sola carrera. Estará al volante del Ford Mustang Dark Horse No. 66 para Garage 66, patrocinado por HitchGo, en el Cook Out 400 en Martinsville Speedway. Este movimiento ha enviado ondas a través de la comunidad de NASCAR, evocando recuerdos del infame escándalo de Chip Ganassi y D.C. Solar.
En 2017, Chip Ganassi Racing y D.C. Solar, una empresa especializada en generadores de energía solar, firmaron un acuerdo de patrocinio de alto perfil. El logo de la empresa adornaba los vehículos de Kyle Larson y Felix Rosenqvist, pero la asociación tomó un giro inesperado en 2018. D.C. Solar fue expuesta como una tapadera para un masivo esquema Ponzi, y sus fundadores, Jeffrey y Renee Carpoff, fueron arrestados por defraudar a inversores por más de mil millones de dólares.
Las repercusiones fueron severas. D.C. Solar declaró bancarrota, lo que llevó a Chip Ganassi Racing a cortar lazos. Si bien el escándalo manchó la imagen del equipo, no fue la única causa de que CGR vendiera su programa de la NASCAR Xfinity Series en 2019. El equipo citó un deseo de concentrarse en otros deportes de motor, como IndyCar e IMSA.
Mientras Mears se prepara para su regreso a NASCAR, ha puesto su mira en su 490º inicio en el más alto nivel. A pesar de tener solo una victoria a su nombre, el ex piloto de Hendrick Motorsports tiene como objetivo duplicar ese récord en el Cook Out 400.
“Estoy feliz de estar de vuelta en un auto de carreras y espero regresar a Martinsville, una de mis pistas favoritas,” comentó Mears, un nativo de California. Dando el debido crédito a sus patrocinadores, agregó: “Estoy emocionado de tener a HitchGo, Mosby’s Towing and Transport, y Coble Enterprises a bordo mientras avanzamos hacia las 500 participaciones en la NASCAR Cup Series.”
La participación de HitchGo, una pequeña empresa con un número de empleados entre 2-10, está atrayendo tanto atención como sospechas de los aficionados. Algunos están trazando paralelismos con la situación de D.C. Solar, a pesar de no haber evidencia de ninguna correlación.
La base de aficionados de NASCAR está dividida sobre estas sospechas, con algunos expresando sus preocupaciones acerca de la asociación entre Garage 66 y HutchGo. A pesar de la falta de evidencia concreta, algunos aficionados están haciendo comparaciones entre esta situación y el escándalo de D.C. Solar.
Un entusiasta de los deportes de motor sintió que el escándalo de D.C. Solar ha dejado un profundo impacto en la base de aficionados, llevándolos a asumir lo peor incluso cuando la situación parece normal.
HutchGo, una empresa que proporciona técnicos móviles de RV a demanda en el oeste de Pennsylvania y el este de Ohio, ha sido defendida por otros aficionados que creen que el patrocinio de la empresa es una estrategia comercial normal dirigida a clientes potenciales dentro de la base de aficionados de NASCAR.
Independientemente de las reacciones mixtas de los aficionados, el regreso de Casey Mears a NASCAR es un evento notable, y su desempeño en la próxima carrera será observado de cerca por entusiastas y escépticos por igual.