A medida que comenzaba la prueba de pretemporada de Fórmula 1 en Baréin, Lewis Hamilton tomó la delantera para Ferrari en la primera hora. Estableció un tiempo encomiable de 1m32.621s en medios C4, superando a Alex Albon de Williams y asegurando su lugar en la parte superior de la tabla de líderes del miércoles.
El impresionante comienzo no llegó sin un pequeño contratiempo. Hamilton experimentó un momento ligeramente complicado en los bordillos en la curva 11 a la izquierda mientras comenzaba a probar los límites del SF-25. No obstante, su récord actual aún está 2.7s por detrás del tiempo más rápido de la prueba de Baréin del año pasado, un récord establecido por Carlos Sainz, su predecesor en Ferrari.
A pesar de esto, el rendimiento de Hamilton, junto con el de todo el campo, ha sido fluido. Cada equipo ha completado con éxito algunas vueltas iniciales, demostrando un comienzo prometedor para las pruebas de pretemporada.
Detrás de Hamilton, Alex Albon quedó a 0.241s, con el Aston Martin de Fernando Alonso asegurando el tercer lugar. Liam Lawson de Red Bull, Jack Doohan de Alpine, Yuki Tsunoda de Racing Bulls, Nico Hulkenberg de Sauber y Kimi Antonelli representando a Mercedes, todos lograron entrar en el top ocho. Ollie Bearman, quedando 2.9s atrás, consiguió el noveno lugar, mientras que Oscar Piastri de McLaren fue el único piloto que aún no había establecido un tiempo de vuelta representativo.
La primera hora de la prueba de pretemporada de Fórmula 1 en Baréin no trajo sorpresas importantes. Los vehículos de los equipos punteros salieron del pitlane sin incidentes inesperados. El coche RB21 de Red Bull parece ser una continuidad directa del RB20 que cerró la temporada anterior, señalando un enfoque consistente por parte del equipo.
Esta primera hora de pruebas establece el escenario para una emocionante temporada de Fórmula 1, donde cada segundo cuenta y cada movimiento es un posible cambio de juego. A medida que los equipos continúan ajustando y perfeccionando sus máquinas, el mundo observa con anticipación para ver quién reinará supremo sobre el asfalto.