Pocos recordarán con cariño el reciente Daytona 500, una carrera que vio un número récord de accidentes desde 2019 con 35 coches destrozados. Entre los descontentos estaba Kyle Larson, cuyo promedio de finalización en el Daytona International Speedway es un desolador 21.9. Larson ha tenido una racha sin victorias en 48 salidas en todas las pistas de drafting, y la reciente decepción en Daytona solo amplificó sus frustraciones.
Sin embargo, la fortuna de Larson dio un giro a mejor en Atlanta. Conocido por sus dificultades en superspeedways, el piloto de Hendrick Motorsports solo ha logrado dos finales entre los cinco primeros en estas pistas, ambos en Talladega. En un giro del destino, Larson cambió su narrativa en el Atlanta Motor Speedway, una pista que combina las características de un superspeedway y una pista intermedia.
En Atlanta, Larson mostró su destreza al volante, asegurando su primera victoria de etapa en un superspeedway cuando ganó la Etapa 2. También lideró la carrera durante 12 vueltas, un contraste marcado con su historial de cinco DNFs en las seis carreras de drafting anteriores en Atlanta. Su rendimiento no solo demostró la versatilidad de su Chevrolet No. 5, sino que también le proporcionó una sensación de alegría y alivio, como reveló en el pódcast ‘Stacking Pennies’.
Sin embargo, el desagrado de Larson hacia Daytona está lejos de ser olvidado. Recuerda su debut en Xfinity en 2013 en la pista, donde chocó contra la valla y destrozó su coche. Su actuación en la salida de Daytona de 2025 solo agregó sal a la herida, ya que luchó con las técnicas de drafting y perdió su oportunidad de ganar debido a una bandera amarilla en la última vuelta y las travesuras de Carson Hocevar.
A pesar de su aversión hacia Daytona, Larson ha mostrado entusiasmo por el reconfigurado Atlanta Motor Speedway, una pista de estilo superspeedway de una milla y media. Admite que preferiría el antiguo Atlanta, pero la reciente carrera ha despertado su emoción. También desea que Daytona y Talladega tomen un ejemplo del libro de Atlanta, ya que cree que eso haría las carreras más agradables tanto para los pilotos como para los aficionados.
Detrás del reciente éxito de Larson en superspeedways se encuentra el veterano de Hendrick Motorsports y cuatro veces campeón de la Copa Series, Jeff Gordon. Gordon, quien tiene tres victorias en el Daytona 500, ha sido una fuente de inspiración y aliento para Larson, especialmente después del decepcionante desempeño de este último en Daytona. El consejo de Gordon a Larson fue simple: «Solo sé Kyle Larson.»
Esta orientación parece haber dado sus frutos, ya que Larson logró su mejor resultado en superspeedway en Atlanta. Ahora, todos los ojos están puestos en Larson mientras continúa su viaje en pistas de drafting, y si puede replicar su éxito en Atlanta en Talladega, está por verse.