El diseñador de coches más legendario de la Fórmula 1, Adrian Newey, ha comenzado oficialmente uno de los proyectos más ambiciosos de su carrera—transformar a Aston Martin en un verdadero contendiente por el título. Después de décadas diseñando máquinas ganadoras de campeonatos para Williams, McLaren y Red Bull, el movimiento de Newey a Aston Martin podría sacudir la parrilla como nunca antes.
Pero, ¿puede la mente más celebrada de la F1 convertir a Aston Martin de un sueño del medio campo en una realidad de campeonato?
De Red Bull a Aston Martin: Un Desafío Totalmente Nuevo
Newey, quien ayudó a construir a Red Bull de un pensamiento secundario a una potencia de la F1, admite que esta transición se siente extrañamente similar a sus primeros días en Red Bull.
“No lo sé aún, pero sospecho que puede estar más del lado de Red Bull,” reflexionó Newey.
🔹 Su traslado de March a Williams lo vio entrar en una operación ya establecida.
🔹 Su transición a McLaren fue una evolución similar, refinando un equipo ya exitoso.
🔹 ¿Pero Red Bull? Eso fue diferente—requirió no solo experiencia en diseño de coches, sino una revisión completa de la infraestructura para crear una cultura ganadora.
Aston Martin se sitúa en algún lugar intermedio. El equipo tiene un gran respaldo financiero, instalaciones de vanguardia y contrataciones de primer nivel—pero carece del pedigree ganador de carreras de una potencia de F1. Ahí es donde entra Newey.
¿Por qué dejó Newey Red Bull?
La sorprendente salida de Red Bull dejó a los aficionados y a los expertos preguntándose: ¿por qué el hombre detrás de los coches más dominantes de F1 se alejaría en la cima del éxito?
“Si me hubieras preguntado hace 12 meses si dejaría Red Bull y comenzaría de nuevo en otro lugar, te habría dicho que estabas loco.”
Pero la política interna en Red Bull, las luchas de poder y un deseo de un nuevo desafío llevaron a una decisión que ni siquiera Newey anticipó.
“Por varias razones, sentí que no sería fiel a mí mismo si me quedaba.”
Una vez que decidió irse, la jubilación era una opción, pero el fuego competitivo seguía ardiendo con demasiada fuerza.
“Me di cuenta de que me aburriría haciendo nada. He amado este trabajo desde que tenía diez años, y he tenido la suerte de disfrutar la mayor parte de mis días laborales, así que ¿por qué detenerme ahora?”
Regulaciones de 2026: ¿Un cambio de juego o una pesadilla?
Newey entra en la Fórmula 1 en un momento crucial—2026 traerá los cambios regulatorios más radicales en décadas, con reformas tanto en chasis como en unidades de potencia.
“Creo que hay una gran posibilidad de que sea una fórmula dominada por motores al principio, así como lo fue 2014.”
🔺 ¿La mayor incógnita? Si la supremacía de la unidad de potencia dictará el rendimiento, tal como Mercedes aplastó la era híbrida en 2014.
🔺 Si las regulaciones favorecen el rendimiento del motor de combustión, un fabricante podría dominar durante años.
🔺 Si el rendimiento eléctrico es el factor clave, los equipos podrían tener más margen para alcanzar.
La asociación exclusiva de Aston Martin con Honda para 2026 significa que Honda debe acertar—o arriesgarse a arrastrar los diseños de Newey con ellos.
¿Influirá Newey en el coche de Aston Martin para 2025?
Mientras que su enfoque principal es 2026, Newey no descarta un papel en el desarrollo de 2025—especialmente con Lawrence Stroll ansioso por acelerar el progreso.
“Mi concentración estará en 2026, pero sin duda Lawrence Stroll querrá que esté un poco involucrado en 2025. Si puedo contribuir en algo, aún no lo sé.”
Si las huellas dactilares de Newey terminan en el Aston Martin 2025, espera señales tempranas de lo que está por venir en 2026.
¿Puede Newey entregar el primer campeonato de F1 de Aston Martin?
🔹 ¿Nuevas instalaciones? ✅
🔹 ¿Financiación de primer nivel? ✅
🔹 ¿Un piloto de nivel campeonato en Fernando Alonso? ✅
🔹 ¿El mejor diseñador en la historia de la F1? ✅
Todas las piezas están ahí. Ahora, depende de Newey y el equipo juntarlas.
“Todavía amo lo que hago, y estoy emocionado por lo que está por venir.”
Aston Martin está apostando por una mente legendaria—y si Newey lo logra, podría ser una de las mayores historias de F1 jamás escritas.