Los patrocinios de NASCAR han sido durante mucho tiempo una piedra angular del deporte, produciendo emparejamientos icónicos como Richard Petty y STP o Jeff Gordon y DuPont. Pero en una nueva era de colaboraciones de marcas, la superestrella de NASCAR Kyle Larson se ha unido a las filas de élite de los atletas globales al asociarse con Prime, la bebida sensación viral cofundada por Logan Paul y KSI. Este movimiento señala un cambio cultural en los patrocinios del automovilismo, ya que Prime irrumpe en un espacio tradicionalmente dominado por marcas como Monster, Red Bull y Gatorade.
Kyle Larson y Prime: Una Combinación Ganadora
Antes de los prestigiosos Chili Bowl Nationals, el campeón de la NASCAR Cup Series 2021 reveló su asociación con Prime de una manera elegante y discreta. A través de Instagram, Larson compartió historias con una botella de Prime Ice, subtitulada:
“Antes de @CBNationals, nuevo Prime @drinkprime.”
Siguió con otra publicación, que decía simplemente: “Los ganadores beben Prime Ice @drinkprime.”
La colaboración no se trata solo de bebidas; es una declaración cultural. Prime, que comenzó como una bebida hidratante, se ha convertido en una marca de estilo de vida, cautivando a la Generación Z y más allá con su estética vibrante, campañas virales y respaldos de celebridades.
La Expansión de Prime en el Automovilismo
El meteórico ascenso de Prime en el mundo del deporte ya ha visto asociaciones con pesos pesados como Patrick Mahomes, Kevin Durant y Floyd Mayweather, así como con marcas globales como FC Barcelona y Arsenal. La incorporación de Kyle Larson a su equipo marca el primer gran paso de Prime en el automovilismo, un ámbito dominado por gigantes de las bebidas energéticas.
La colaboración es un gran golpe para Prime, llevando la marca al mundo de NASCAR, lleno de alta velocidad y adrenalina. Para Larson, es una oportunidad de alinearse con una marca que encarna la energía fresca y vibrante que él aporta a las carreras.
Un paisaje cambiante en los patrocinios deportivos
La presencia de Prime en NASCAR destaca una tendencia más amplia: la evolución de los patrocinios para satisfacer las preferencias de audiencias más jóvenes y digitalmente conectadas. A diferencia de las marcas tradicionales que dependían de la publicidad convencional, Prime prospera en las redes sociales, aprovechando influencers y contenido viral para conectar con los aficionados.
La asociación de Kyle Larson señala que NASCAR está listo para abrazar este cambio. Como una de las estrellas más talentosas y comercializables del deporte, Larson cierra la brecha entre las raíces tradicionales de NASCAR y un futuro impulsado por marcas dinámicas y orientadas a la juventud.
Prime: Más que una bebida
Desde su lanzamiento, Prime ha trascendido su estatus como una bebida para convertirse en un fenómeno cultural global. Desde su audaz branding hasta sus campañas de marketing lideradas por influencers, la bebida ha encontrado un espacio como un accesorio imprescindible en el deporte y la cultura pop. Sus colaboraciones con estrellas como Israel Adesanya, iShowSpeed y ahora Kyle Larson, refuerzan su estatus como una marca para ganadores y marcadores de tendencias.
El futuro de Prime y NASCAR
La asociación de Larson con Prime señala posibilidades emocionantes para el futuro de los patrocinios en NASCAR. Con la capacidad comprobada de Prime para dominar las redes sociales y captar la atención en los deportes, esta colaboración tiene el potencial de introducir a una nueva generación de aficionados al deporte.
A medida que Prime continúa su rápida expansión en nuevos mercados, su presencia en NASCAR podría ser un cambio de juego, desafiando normas establecidas y creando nuevas oportunidades para atletas y marcas por igual.