Kevin Magnussen, el piloto danés conocido por su talento innato y su estilo de conducción tenaz, ha revelado una oportunidad perdida que podría haber alterado drásticamente la trayectoria de su carrera en la Fórmula 1: una posible conducción con Red Bull Racing. Reflexionando sobre sus decisiones, Magnussen compartió que rechazó la oportunidad de unirse a Toro Rosso (ahora Racing Bulls) cuando Daniel Ricciardo fue promovido a Red Bull en 2014. En su lugar, optó por McLaren, una decisión que ahora ve con emociones encontradas.
«Un Comienzo Soñado Que Rápidamente Se Amargó»
Magnussen irrumpió en la escena de la F1 en 2014, debutando con McLaren y logrando un extraordinario segundo lugar en su primera carrera en Melbourne. El logro, ayudado por la descalificación de Ricciardo, alimentó la confianza de Magnussen:
“Realmente pensé, ‘OK, la batalla [por el título mundial] está abierta, en mi primer año,’” le dijo a Motorsport-Total.
Sin embargo, la competitividad de McLaren disminuyó, y el sueño se desmoronó rápidamente. Al final de la temporada, Magnussen fue reemplazado por Fernando Alonso, dejándolo sin asiento.
«El Camino de Red Bull No Tomado»
El manager de Magnussen supuestamente tuvo conversaciones con Christian Horner de Red Bull, explorando un movimiento a Toro Rosso como una opción de respaldo. Sin embargo, Magnussen desestimó la idea, confiado en que McLaren era la mejor apuesta:
“Dije, ‘No, no, no lo hacemos.’ Lo cual probablemente debería haber hecho,” admitió Magnussen en retrospectiva.
Vio cómo Toro Rosso se convirtió en una plataforma de lanzamiento para pilotos como Pierre Gasly y Alex Albon, ambos de los cuales eventualmente obtuvieron asientos en Red Bull.
“El tipo que consiguió ese asiento en Toro Rosso terminó en Red Bull,” lamentó Magnussen, aludiendo a la oportunidad perdida de unirse a uno de los equipos dominantes de la F1.
«Una Carrera de Altibajos»
Después de dejar McLaren, Magnussen soportó una temporada inolvidable con Renault en 2016, anotando solo siete puntos. En 2017, se trasladó a Haas, donde pasó la mayor parte de su carrera en F1. Aunque nunca regresó al podio, Magnussen desempeñó un papel clave en establecer al equipo estadounidense como una presencia competitiva en el medio del pelotón.
El viaje de Magnussen en la F1 aparentemente terminó en 2020 cuando Haas lo despidió. Hizo un cambio hacia las carreras de coches deportivos, encontrando éxito en el Campeonato IMSA SportsCar con Cadillac Chip Ganassi. Pero la F1 volvió a llamarlo en 2022, cuando Haas hizo un movimiento de emergencia para volver a firmarlo después de que Nikita Mazepin fuera despedido.
«Mirando hacia adelante: Un nuevo capítulo en el automovilismo»
Con su capítulo en la F1 aparentemente cerrado, Magnussen volverá a las carreras de resistencia en 2025, uniéndose a BMW M Motorsport como piloto oficial. Está listo para competir en las prestigiosas 24 Horas de Daytona el próximo mes, marcando el inicio de una nueva fase en su carrera.
«¿Qué podría haber sido?»
La historia de Magnussen subraya la importancia del tiempo y la oportunidad en la F1. Su decisión de elegir McLaren sobre Toro Rosso fue lógica en ese momento: el pedigrí de McLaren superaba con creces al del equipo junior de Red Bull. Sin embargo, en retrospectiva, el programa de Red Bull podría haber ofrecido un camino más claro hacia un asiento de primer nivel.
A pesar de las oportunidades perdidas, Magnussen no tiene arrepentimientos sobre su tiempo en la F1. Desde un debut estelar hasta su papel en la formación de Haas, su carrera ha estado marcada por la resiliencia y la adaptabilidad.
A medida que Magnussen centra su atención en las carreras de coches deportivos, los aficionados se quedan preguntándose: ¿Cómo podría haber sido la carrera de F1 de Kevin Magnussen si hubiera dicho “sí” a Red Bull?